Hake Mate apuesta por la cocina de mercado, elaborada con producto frescos, siguiendo con la línea de cocina mediterránea acompañada por platos internacionales. El local está dividido en tres ambientes diferentes: las mesas altas, la barra y el comedor. Un ambiente donde colores y texturas se superponen para crear un ambiente cálido, inspirado en la decoración industrial a través de los materiales como el hierro y el ladrillo visto.

La carta es muy variada y también cuentan con menú del día entre semana. Para comenzar, pedimos el Carpaccio de solomillo de vaca gallega aliñado con aceite de boletus, trufa de verano, lascas de parmesano y chips de verduras. Habíamos probado muchos carpaccios, pero ninguno como este. Nos encantó la mezcla de ingredientes, donde la trufa de verano ocupaba un lugar protagonista. También pedimos las Alcachofas confitadas con aceite de cítricos y sal maldón, terminadas en horno y servidas con parmesano en dos texturas. Nos pareció muy original la textura del parmesano, como si fuese nata montada.

Su plato estrella es el Fish and chips, elaborado con merluza fresca, y el que inspiró el nombre del local. Su presentación en cucurucho y su acabado lo convierten en un plato gourment, servido con salsa tártara y chudney de mango. De carne, nos recomendaron la Picanha asada dos salsas: 350gr. de sabrosa carne acompañada de yucca, batata frita y servida con salsa anticucho y chimichurri. Sin duda, un producto bien tratado con dos salsas que le aportan un sabor exótico. Para terminar, nos decantamos por el Sundae de caramelo con palomitas. Un festival de postre, perfecto para compartir y con mucho contraste de sabores.

Hake Mate también dispone de menú del día entre semanas, afterworks, copeo nocturno y una terraza estupenda para disfrutar del buen tiempo. Todo ello en una localización excepcional. 
 
Dirección: Calle Serrano 120, Madrid.

Deja una respuesta